Los tiburones martillo pertenecen a la familia de los esfirnidos (sphyrna = martillo). Son criaturas fascinantes que en su evolución han adquirido adaptaciones únicas para enfrentar los desafíos de la caza y la defensa en su hábitat, entre las cuales destacan las estrategias para mantener su temperatura corporal mientras cazan en aguas profundas y frías.
A diferencia de los mamíferos marinos que pueden regular internamente su temperatura corporal, los tiburones martillo son ectotérmicos, lo que significa que su temperatura corporal depende en gran medida de su entorno. Esto es una limitante en el rango de distribución y hábitat para las especies que, al igual que los tiburones martillo, son ectotérmicas.
Un estudio reciente reveló un comportamiento previamente desconocido que sorprendió a los biólogos; los tiburones martillo «contienen la respiración» para mantener su temperatura corporal durante las inmersiones en aguas profundas y frías. Este fenómeno tiene similitudes con las estrategias de termorregulación empleadas por los mamíferos marinos, y podría ser común entre otros tiburones y peces que se sumergen a grandes profundidades.
Investigadores liderados por Mark Royer utilizaron tecnología de vanguardia para estudiar a los tiburones martillo. Utilizaron unos chips internos llamados biologgers que les permitieron medir la profundidad, la temperatura del agua, la actividad, los movimientos corporales y la temperatura interna de los tiburones. Gracias a la información obtenida de estos biologgers, descubrieron que, durante las inmersiones profundas, los tiburones martillo mantenían una temperatura corporal elevada, hasta 20 grados Celsius por encima de la temperatura ambiente.
Cuando se sumergen, los tiburones martillo cierran sus bocas y aberturas branquiales de manera ajustada, reducen el flujo de agua fría a través de sus branquias, minimizando así la pérdida de calor corporal. Sin embargo, al ascender a aguas más cálidas, comienzan a perder calor rápidamente, lo que se atribuye a la apertura de las aberturas branquiales y la transferencia convectiva de calor.
Por supuesto, la característica más llamativa de los tiburones martillo son sus alargadas cabezas que les dan su nombre común. Esta forma les brinda a estos peces una mayor área sensorial, ya que los ojos y los órganos sensoriales se encuentran más separados, lo que les permite tener una visión panorámica y una mejor percepción de las presas. Además, esta forma les otorga una mayor estabilidad hidrodinámica, facilitando su nado ágil y rápido, mientras que el lóbulo extendido de la cabeza les proporciona una mayor superficie de detección de señales eléctricas emitidas por los peces, lo que les ayuda en la búsqueda y localización de presas.
Estas adaptaciones asombrosas son un testimonio más de la infinita sabiduría de la naturaleza y una invitación a cuidar más aquello que ha tomado millones de años trabajo para lograr sus mejores expresiones. En Acuario Michin puedes aprender más sobre los tiburones, visítanos y descubre más cosas sorprendentes sobre estos majestuosos peces.